Cuidados y recomendaciones
¿Qué es una quemadura solar?

Una quemadura solar es una reacción visible por la exposición de la piel a los rayos ultravioleta (UV), que son los rayos invisibles de la luz del sol. Los rayos ultravioleta pueden también producir un daño invisible a la piel. Las quemaduras solares múltiples o excesivas producen el envejecimiento prematuro de la piel y pueden dar como resultado cáncer de piel. El cáncer de piel es el tipo más común de cáncer en Estados Unidos y la exposición al sol es la causa principal del cáncer de piel.

Los niños y jóvenes a menudo pasan una buena parte del día jugando fuera, especialmente durante el verano. Los niños que tienen la piel blanca, lunares o pecas, o que tienen antecedentes familiares de cáncer de piel tienen más probabilidades de desarrollar cáncer de piel en el futuro.

La exposición al sol durante las actividades cotidianas y los juegos es la causa de la mayoría de los daños producidos por el sol. La sobre exposición a la luz solar antes de los 18 años de edad es más perjudicial para la piel.

Los rayos UV son fuertes durante todo el año para nosotros debido a que estamos en el trópico y en esta zona siempre el sol proyectará sus rayos en forma perpendicular. Las horas de mayor intensidad van entre las 10:00 de la mañana y las 3:00 de la tarde.

¿Cuáles son los síntomas de una quemadura solar?
A continuación se enumeran los síntomas más comunes de una quemadura solar. Sin embargo, cada niño puede experimentarlos de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir:

¿Qué es una quemadura solar?

Enrojecimiento.
Hinchazón de la piel.
Dolor.
Ampollas.
Fiebre.
Escalofríos.
Debilidad.
Sequedad.
Comezón.
Desprendimiento de la piel varios días después de la exposición.

Los síntomas de una quemadura solar pueden parecerse a los de otras condiciones de la piel. Siempre consulte con el médico para el diagnóstico.

Primeros auxilios para las quemaduras solares:
Realice un baño frío o utilice compresas frías sobre la zona quemada por el sol.
Suministre acetaminofén o ibuprofeno para las molestias. Asegúrese de seguir las instrucciones del medicamento.
Aplique un hidratante de uso tópico, gel de aloe, crema de hidrocortisona o un calmante de uso tópico para el dolor en la piel quemada por el sol. Evite los productos comerciales que contengan Benadryl o benzocaína, debido a la posibilidad de irritación de la piel o alergia.
Si hay ampollas, no las rompa, ya que se pueden infectar. En este caso se trata de una quemadura de mayor gravedad y debe solicitar la evaluación del médico de CEM.
Manténgase alejado del sol.

¿Cuándo debo llamar al médico de CEM?
El tratamiento específico de las quemaduras solares será determinado por el médico y puede depender de la gravedad de la quemadura solar. En general, llame al médico de CEM si:

La quemadura solar es grave o se forman ampollas.
Existen síntomas de insolación, como fiebre, escalofríos, náuseas, vómitos o sensación de desmayo.

¿Cómo se previenen las quemaduras solares?:
La protección del sol se debe promover desde la infancia. Se calcula que del 60 al 80 por ciento de toda la exposición solar de nuestra vida se produce en los primeros 18 años de vida.

La mejor forma de prevenir una quemadura solar es seguir los A, B, C recomendado por la Academia Americana de Dermatología:

Alejarse:permanecer alejado del sol en la mitad del día. A esta hora es cuando los rayos del sol son más dañinos.
Bloquear:bloquee los rayos del sol utilizando un factor de protección solar (SPF) de 15 o un filtro solar más alto. Aplique la loción 30 minutos antes de salir afuera y vuelva a aplicarla a menudo durante el día. Los protectores solares no deben utilizarse en los bebés menores de 6 meses de edad.
Cubrirse:vestirse utilizando ropa protectora, como una camisa de manga larga y un sombrero cuando se esté expuesto al sol. Utilice ropa de tejido tupido para bloquear los rayos del sol tanto como sea posible. Mantenga a los bebés de menos de 6 meses de edad fuera del alcance de los rayos directos del sol todo el tiempo. Los sombreros con ala son importantes

¿Qué es una quemadura solar?¿Qué son los protectores solares?
Los protectores solares protegen la piel contra las quemaduras solares y son un factor importante en el bloqueo de la penetración de los rayos ultravioleta (UV). Sin embargo, los protectores solares no bloquean la radiación UV en un 100 por ciento.

La terminología empleada en las etiquetas de los protectores solares puede crear confusiones. La protección que brinda un protector solar se indica mediante el factor de protección solar (su sigla en inglés es SPF) impreso en la etiqueta del producto. Un producto con un SPF mayor de 15 se llama un bloqueador solar.

¿Cómo se usan los protectores solares?:
El protector solar brinda protección contra las quemaduras solares y reduce al mínimo el bronceado, debido a que refleja los rayos UV. El uso correcto de los protectores solares es un factor importante para la protección de la piel. Tome en cuenta lo siguiente:

Elija un protector solar para los niños y pruébelo en la muñeca de su hijo antes de utilizarlo. Si su hijo desarrolla irritación ocular o de la piel, elija otra marca. Aplique el protector solar con mucho cuidado alrededor de los ojos.
Elija un protector solar de amplio espectro que filtre tanto los rayos ultravioleta A (UVA) como los B (UVB).
Aplique el protector solar en todas las zonas de la piel expuestas, incluso en el borde de las orejas, los labios, la parte posterior del cuello y los pies, que siempre suelen quedar desprotegidas.
Utilice filtros solares para todos los niños mayores de 6 meses de edad, independientemente del tipo de piel, porque todos los tipos de piel necesitan protección contra los rayos solares UV. Incluso los niños de piel oscura pueden sufrir quemaduras solares dolorosas.
Aplique el protector solar 30 minutos antes de salir al sol para darle tiempo a funcionar. Úselo generosamente y vuelva a aplicarlo cada dos horas después de estar en el agua o después de hacer ejercicio o sudar. Los protectores solares no son simplemente para la playa: utilícelos cuando su hijo esté jugando en el jardín o participando en deportes.
Use un protector solar impermeable o resistente al agua.
El uso de un protector solar con un SPF de 20 a 30 ofrece una buena protección contra las quemaduras solares y evita el bronceado. Los protectores solares con un factor SPF mayor brindan protección por períodos más prolongados que los que tienen SPF menores. Hable con su hijo mayor o adolescente acerca del uso del filtro solar y por qué es importante. Sea un buen ejemplo para ellos utilizándolo usted mismo.
Enseñe a evitar las camas y salones de bronceado. La mayoría de las camas y salones de bronceado utilizan bombillas de rayos ultravioleta A. Según las investigaciones realizadas, los rayos UVA pueden contribuir al envejecimiento prematuro y a la aparición del cáncer de piel.
La Academia Estadounidense de Pediatría establece que debe aplicarse pantalla solar a los bebés menores de 6 meses si no llevan la vestimenta adecuada o no se encuentran protegidos a la sombra.

 

 

 

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